viernes, 25 de marzo de 2016

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Ribeirão Pires, Sp, Brasil

¡Paz mis amados hijos, paz!

Hijos míos, Yo vuestra Madre, os invito a la conversión, pero muchos no escuchan mi llamada y continúan cometiendo terribles pecados.

Hijos míos, ¡no pequéis! Dejad las cosas que no os conducen a Dios. Que vuestras vidas pertenezcan a mi Hijo Jesús, y que vuestros corazones estén abiertos para recibir su amor divino.

Rezad por el mundo que está lejos del Corazón Divino de mi Hijo Jesús y que no se detiene ni un momento a pensar en la eternidad.

Alimentaos con el cuerpo y la sangre de mi Hijo Jesús. Este misterio de amor es vida para vuestras vidas, hijos míos, es salvación para vuestras almas. Sed de Dios en corazón, alma y cuerpo. Sed del Señor ofreciéndole vuestro amor.

Amor, esto es lo que Dios os pide, porque ya os lo ha dado todo: a sí mismo, con su cuerpo y con su sangre, para daros toda la plenitud de la gracia y de la bendición.

No desperdicies tantas gracias. Aprende a pertenecer a Dios. Aprende a hacer la voluntad de Dios. Yo estoy contigo y nunca te abandonaré. Que los méritos de la pasión y muerte de mi Hijo Jesús os den la fuerza para vencer todo mal y todo pecado.

Os amo, hijos míos, y con mi amor, el amor del que está lleno mi Corazón Inmaculado, quiero conduciros a Dios, el Único que es el camino, la verdad y la vida.

Volved a los vuestros con la paz de Dios. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.