sábado, 14 de julio de 2012

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

Nuestra Señora vino una vez más del cielo para transmitir sus súplicas. Nuestra Santa Madre llama a la conversión, la oración y la santidad. Si queremos ser de Dios, liberémonos de la vida del pecado. En la oración encontraremos la fuerza para vencer al diablo, al mundo y a la carne. Las pruebas son necesarias porque a través de ellas nos purificamos de nuestras imperfecciones y debilidades. Si confiamos plenamente en la protección de Dios y en su amor misericordioso, entonces Él puede ayudarnos concediéndonos la gracia para superar todas las barreras y pruebas espirituales.

Paz, mis amados hijos!

Este es el tiempo para la conversión, la oración y la paz. Cambien sus vidas renovando sus corazones cada día en el amor de Dios.

Mis hijos, todavía no oran como les pido. Oren con fe, con amor y con el corazón. Oren mi rosario todos los días, solo así tendrán la fuerza para hacer lo que Dios quiere de ustedes, y no se desanimarán ni se cansarán por las pruebas de la vida.

Oren mucho para que tengan la luz de Dios para entender lo que deben hacer y cómo deben actuar.

Muchos de ustedes aún no han abierto sus corazones a Dios, porque todavía veo en ellos su voluntad prevaleciendo sobre la voluntad de Dios. Luchen, luchen para superar sus imperfecciones siendo obedientes a la voluntad de Dios.

Solo Dios puede ayudarlos, pero si no abren sus corazones a Él, nunca cambiarán. Comiencen a caminar de nuevo por el camino que conduce al cielo. Es el camino que mi Hijo ha preparado para cada uno de ustedes para alcanzarlo. Con oración, con sacrificio y con penitencia lograrán caminar por este camino siempre avanzando. ¡Ánimo! Estoy aquí para ayudarlos y bendecirlos.

Todavía no han abierto verdaderamente sus corazones a Dios, porque a menudo pecan y son desobedientes. ¡No pequen más! Pidan perdón por sus pecados y vuelvan a Dios. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!