domingo, 22 de julio de 2012

Octavo Domingo después de Pentecostés.

El Padre Celestial habla después de la Santa Misa Tridentina de Sacrificio y Adoración del Santísimo Sacramento en la iglesia doméstica en Göttingen a través de Su instrumento e hija Anne.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo Amén. Durante la Santa Misa de Sacrificio, muchos ángeles nuevamente se movieron a esta iglesia doméstica en Göttingen. Estaban agrupados especialmente alrededor del altar de sacrificio, la Pietà y el Jesús Misericordioso. Hubo especialmente muchos ángeles presentes en el altar de María. El pequeño bebé Jesús se alegró y nos bendijo a menudo durante la Santa Misa de Sacrificio. Los ángeles del tabernáculo estaban brillantemente iluminados. Estaban agradecidos de que adoráramos con ellos, porque muchos de ellos ya no quieren adorar.

El Padre Celestial dice: Yo, el Padre Celestial, hablo ahora y en este momento a través de Mi instrumento obediente, humilde y voluntario e hija Anne. Ella yace en la plena verdad, porque ella solo repite palabras que vienen de mí.

Hoy celebran el octavo domingo después de Pentecostés. Mis amados hijos, Mi amada pequeña grey, Mis amados seguidores y ustedes peregrinos de cerca y de lejos, los amo a todos y deseo que caminen hacia Mi Santo Altar de Sacrificio. Espero que se unan a la celebración diaria de este Santo Banquete de Sacrificio según el (a href="http://www.anne-botschaften.de/body/Hinweis.html" target="_blank")DVD. Esta es la verdadera Santa Misa de Sacrificio en el Rito Tridentino según Pío V. Deben seguir este verdadero Banquete de Sacrificio. Muchas corrientes de gracias se derramarán sobre ustedes, - innumerables gracias. Por eso los aman aún más y son atraídos hacia Mí - hacia Mi Hijo Jesucristo, quien los ama mucho y les ha dado este Santo Banquete de Sacrificio. Es el mayor regalo para ustedes. Tómenlo tan a menudo como puedan.

Y ahora, Mis amados, quiero revelarles sobre todo con respecto al Santo Sacramento de la Penitencia. Vayan a esta Santa Confesión con bastante frecuencia y prepárense porque se acerca el momento en que apareceré con Mi Santísima Madre. Pero antes de eso, se les da a todas las personas muchas oportunidades para regresar a través de la visión del alma. No piensen, Mis amados, que no dejaré que este evento suceda. ¡Sí! ¡Sucederá!

Están siendo desviados por muchos sacerdotes, porque no creen que Yo, el Padre Celestial, solo muestre misericordia y no deje que Mi justicia caiga sobre ellos. El Santo Sacramento de la Penitencia es importante para todos. Si se arrepienten profundamente, recibirán un gran amor de Mi Hijo Jesucristo. Porque quien ama mucho también será perdonado mucho. El amor es importante, Mis amados. Y experimentarán este amor. El factor decisivo no es tanto su culpa, sino que lamenten y comiencen de nuevo.

Deseo especialmente de Mi Sumo Pastor que se arrepienta, que sienta un profundo remordimiento. Aunque vendió y traicionó esta iglesia, estoy esperando su arrepentimiento y todavía lo estoy esperando para que renuncie a su cargo. Tiene una buena razón y es importante. No debe permitir que esta Iglesia continúe siendo llevada a la confusión por los masones, porque él mismo está encadenado y ellos lo mantienen atado y lo controlan. Desafortunadamente, ha dado su poder de llave a sus obispos. Ustedes ahora determinan, no el Sumo Pastor, cómo debe ser. Pero lo perdonaría. Y lo tomaría gustosamente en mis brazos, porque estoy esperando su alma arrepentida.

Deben arrepentirse, Mis amados, profundamente e íntimamente. Entonces sentirán el perdón y Mi amor y el amor de Mi Hijo quien instituyó este Santo Sacramento de la Penitencia para ustedes Mismo porque los ama inmensamente. Él no quiere dejar que vayan a la corrupción eterna, sino que quiere salvarlos, salvar sobre todo a través de mis mensajeros, quienes una y otra vez hacen expiación, quienes asumen severos sufrimientos sin lamentarse, porque están allí para los demás y hablan palabras de verdad a través de mí, su padre celestial. Estas palabras son de mí, no de mi mensajero. Les revelo esto a las personas porque quiero salvarlos. Este anhelo por sus almas se hace cada vez mayor en mí. Por lo tanto, Mi Hijo Jesucristo también continuará sufriendo en el alma de expiación, quien ama y mora en ella.

Sí, mi pequeña, no es fácil para ti y tampoco será fácil para ti en el futuro. Este sufrimiento se volverá casi insoportable. Pero depende de cuántas almas expiatorias estén dispuestas a sufrir contigo, es decir, estén dispuestas a asumir este sufrimiento junto con Mi Hijo Jesucristo para salvar a los hijos de los sacerdotes para fundar el Nuevo Sacerdocio. La compañía aún no ha sido fundada. ¿Por qué? Porque no hay suficientes almas expiatorias que estén dispuestas a salvar a las almas que no quieren arrepentirse. Pueden ver que muchos sacerdotes yacen en el sacrilegio. Sí, es verdad, Mis amados, pero un profundo arrepentimiento en una buena santa confesión a un sacerdote santo hace milagros. Podrían creer de nuevo que podrían amar, podrían adorar el Santísimo Sacramento del Altar, que no adoran porque ya no quieren creer, porque son demasiado convenientes para hacer sacrificios y porque, sobre todo, son demasiado convenientes para celebrar una Santa Misa de Sacrificio - no una comunión de comidas. A estos no los amo, porque Mi Hijo ya no puede transformarse allí. Tuve que sacarlo de los tabernáculos porque tuvo que sufrir demasiado por sus hijos sacerdotales, que están en graves sacrilegios y están pecando más que nunca hoy.

Vengan a Mi Santo Banquete de Sacrificio, Mis amados hijos de sacerdotes. Espero diariamente por ustedes, por su expiación, por su amor, por su conversión. En todo momento estoy listo para perdonarlos. E incluso si sus pecados fueran rojos como el escarlata, serían blancos como la nieve, porque los perdonaré. Estoy listo para perdonarlo todo si solo vinieran a Mi corazón, al corazón de Mi Padre, al corazón de Mi Hijo y del Espíritu Santo. Los amo más cada día. ¿Por qué? Porque de lo contrario este evento se volvería aún más cruel de lo que pueden imaginar.

El firmamento cambiará, cambiará completamente. Las estrellas caerán del cielo y los rayos caerán a la tierra a una velocidad vertiginosa. La bola de fuego correrá por las calles y no podrán detenerla, porque devastará regiones enteras. La oscuridad vendrá sobre ustedes.

Por lo tanto, Mis amados, les digo una vez más, manténganse alejados de estas iglesias modernistas y celebren el Santo Banquete de Sacrificio en sus hogares según el DVD. Entonces tendrán una Santa Misa de Sacrificio válida y podrán reflexionar sobre su arrepentimiento y sobre su camino de santidad. Deben esforzarse por la santidad y no pensar que si se arrepienten, sus debilidades no se mostrarán. ¡No! Mantendrán sus debilidades. ¿Por qué? Porque entonces vienen a mí y a Mi Hijo y ruegan por amor y perdón. Esto es lo que amamos - la Trinidad - su arrepentimiento. Porque queremos mostrarles el gran amor divino. Esfuércense por la santidad y amen más de lo que los amo. Dejen que su anhelo crezca. Y ahora los bendigo con todos los ángeles y santos, especialmente con Mi Santísima Madre, en la Trinidad en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Amén.

Alabado y bendito sea Jesucristo en el Santísimo Sacramento del Altar sin fin. Amén.